La cara norte de la iglesia de la Asunción de Vinaròs ha recuperado las pinturas arquitectónicas fingidas que recubren sus muros después de la intervención de urgencia que ha cofinanciado la Diputación de Castellón con 20.000 euros para evitar su desaparición definitiva.
Ahora, la intención del área de Cultura, dirigida por Ruth Sanz, es actuar y reparar el muro que recae en la calle Sant Cristòfol. Para ello se han reservado 40.000 euros más para continuar este año con la protección del edificio, catalogado como Bien de Interés Cultural. En total, en dos años se habrán invertido 60.000 euros en la protección del patrimonio cultural vinarocense.
“Con esta intervención que acabamos de dar por finalizada hemos redescubierto de nuevo estos frescos que datan del siglo XVIII y que hacen singular todavía la iglesia parroquial de Vinaròs”, ha señalado Sanz, quien ha estado en el exterior del templo junto al alcalde, Guillem Alsina, para comprobar el resultado de la intervención.
La actuación de urgencia se ha dado tras detectar el rápido deterioro de las pinturas murales, que fueron redescubiertas y restauradas en 2013. Sin embargo, la deficiente restauración ha desembocado en un deterioro acelerado que borró hace unos pocos años las trazas de los muros y que amenazaba con perderlas para siempre. Antes de los trabajos, la Diputación, a instancias del Ayuntamiento, solicitó un informe técnico para determinar la mejor técnica para preservar durante décadas las pinturas, que evocan edificaciones defensivas.
Las labores de restauración son compartidas entre la Diputación de Castellón y el Obispado de Tortosa. “Colaboramos para poner en valor nuestro patrimonio cultural y artístico, tan importante desde el punto de vista turístico para una ciudad que quiere ser también referencia en el norte de Castellón”.