La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y el comisario jefe de la Policía Local, Roberto Verdoy, se han reunido hoy en el Ayuntamiento con representantes de la asociación vecinal Playa de Almazora para presentarles el nuevo protocolo de investigación de olores procedentes del polígono del Serrallo. En el encuentro han participado por videollamada Beatriz Fatás y Lucía Juan, jefa y técnica del Servicio de Protección de la Atmósfera de la Conselleria de Transición Ecológica, respectivamente.
Tal como ha indicado Galí, este documento sienta las bases para centralizar llamadas y avisos procedentes de Almassora y Castelló para que, en tiempo real, la Generalitat Valenciana pueda exigir a las empresas del polígono petroquímico la información sobre su actividad en ese momento y actuar de forma urgente. El nuevo protocolo servirá como un mecanismo de investigación y diagnosis motivado por las quejas por olores en el entorno del Grao y la playa de Almassora.
“Se producen en episodios de un corto periodo de tiempo (normalmente 1-2 días cada episodio) y en los que se detallan olores intensos, generalmente descritos por la población como olor a gas (hidrocarburos)”, incide el informe. De esta forma, todos los agentes implicados en las labores de aviso y/o detección de episodios de olores dispondrán en el menor tiempo posible de posibles causas y de las actividades de cada sector industrial de la zona.
En este protocolo participa la Generalitat Valenciana a través de la AVSRE (Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias), el CEPIFC (Central de Comunicación Provincial de Prevención de Incendios de Castellón), la EPSAR (Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales) y la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental. También participa el Ayuntamiento de Castellón, el Ayuntamiento de Almassora, la Autoridad Portuaria de Castellón (APC) e INDES (Asociación Industrias del Serrallo).
Una vez que la Conselleria disponga de toda la información recopilada en diferentes episodios, el departamento autonómico analizará e intentará obtener conclusiones sobre el origen de los olores detectados. Para ello, el protocolo se activará en cuanto se produzcan quejas de la población por olores intensos.
La información solicitada por la AVSRE (112) será: lugar exacto, identificación de la persona que realiza la comunicación donde se percibe el olor (calle y número), descripción del tipo de olor e intensidad, hora de la comunicación y periodo en el que ha detectado el olor. Si la llamada informa de olor a gas se clasificará como escape y, además de recoger la información protocolizada para esta clasificación, también recogerá los datos de las llamadas asociadas. Una vez cesado el episodio, el 112 analizará todos los datos e informará de las causas del incidente o, en caso contrario, establecerá que el episodio no está vinculado con el polígono.