Almassora documenta los restos de la fuente hallados en la plaza Mayor para continuar las obras

Almassora documenta los restos de la fuente hallados en la plaza Mayor para continuar las obras

Las marcas que indican la antigua existencia de una fuente en la plaza Mayor de Almassora pertenecen a principios del XX y no suponen un obstáculo para la continuidad de los trabajos. La empresa encargada de las catas arqueológicas ya ha contactado con la Conselleria de Patrimonio para informar del hallazgo y durante la jornada de hoy será un topógrafo quien visite la zona para documentar los restos antes de continuar.

El rebaje del pavimento ha dejado a la luz la huella que quedó de la antigua fuente, que no se conserva, así como restos de una cañería de plomo de unos 80 años y otros restos de plomo más antiguos que marcan la entrada y salida del agua y la ubicación de ese elemento con el que, probablemente, el vecindario de la zona suplía la falta de agua potable en las viviendas.

Todavía hoy las personas más mayores recuerdan la existencia de esa fuente y queda alguna fotografía antigua que lo constata. También los diferentes cambios en la regulación del pavimento indicaron a los profesionales la posibilidad de hallar este tipo de restos durante la excavación de las obras del casco antiguo, trabajos cofinanciados al 50% por los fondos FEDER de la Unión Europea, como finalmente ha ocurrido.

El protocolo marcado por la Conselleria de Cultura, a través de los servicios de arqueología, señala la necesidad de documentar ese antiguo pozo ciego, realizar los alzados correspondientes y enviar el informe a la administración para, previsiblemente, retirar los elementos la próxima semana y continuar con la segunda fase de peatonalización del casco antiguo con normalidad.

Además de la plaza Mayor, las calles San Miguel, San Cristóbal, San Roque, San Juan, Virgen de los Dolores, Virgen de la Luz y travesía Eiximeno se someten a la renovación ejecutada por la empresa Ravi, al igual que en la primera fase de los trabajos, con un plazo de ejecución de seis meses.

En el horizonte está la homogeneización del barrio con el criterio de la accesibilidad como prioridad. Así, la reforma elimina los bordillos para dar paso a una acera a una única altura en todo el trazado con servicios auxiliares también renovados. El Ayuntamiento de Almassora aprovecha la intervención, adjudicada por 430.559 euros, para mejorar las telecomunicaciones y servicios públicos dentro de la misma obra.