Aldeas Infantiles SOS reconoce la importante labor del voluntariado en favor de la integración social de la infancia vulnerable

Aldeas Infantiles SOS reconoce la importante labor del voluntariado en favor de la integración social de la infancia vulnerable

Los voluntarios y voluntarias que dedican parte de su tiempo y sus conocimientos a apoyar el trabajo de Aldeas Infantiles SOS contribuyen a mejorar la integración social y el desarrollo personal de los niños, niñas, jóvenes y familias en situación de vulnerabilidad a quienes atiende. Así lo asegura la organización con motivo del Día Internacional de los Voluntarios, que se celebra el 5 de diciembre.

Las circunstancias generadas por la pandemia, que obligaron a interrumpir de manera temporal las actividades de voluntariado en 2020, unidas a un incremento en el número de solicitudes recibidas por el Programa de Voluntariado de Aldeas, impulsó la creación de una modalidad de voluntariado online dedicada principalmente al apoyo escolar y realizada con todas las garantías de seguridad. “A día de hoy el voluntariado online se ha consolidado y seguirá siendo una modalidad de colaboración ofrecida por Aldeas; ha venido para quedarse“, aseguran desde la organización.

Las actividades presenciales de voluntariado se han ido restableciendo con estrictos protocolos anti-COVID-19, y han vuelto a la normalidad en la mayoría de los programas, donde conviven con las digitales, demostrando que la solidaridad no conoce barreras. La tecnología ha acercado esta forma de contribuir a la sociedad a personas que por motivos geográficos o laborales no habían podido hacerlo antes.

“Las personas voluntarias ofrecen un apoyo a nuestros profesionales que revierte directamente en los niños, niñas y jóvenes, para quienes constituyen referentes positivos en los que fijarse y en quienes observan muy de cerca esos valores que intentamos transmitirles en su proceso hacia una vida adulta satisfactoria y feliz“, afirman desde Aldeas. Por eso, la organización propicia su integración en los programas de atención directa a la infancia, ofreciéndoles la formación presencial o virtual necesaria a través de su Escuela de Formación y acompañándolos en todo momento.

Un impacto positivo y bidireccional

Las tareas que realizan los voluntarios y voluntarias responden a las necesidades de los distintos programas de cada territorio. Las más demandadas están relacionadas con la educación: apoyo escolar y clases de ofimática, informática e idiomas. Pero también colaboran en actividades deportivas y de ocio, en el acompañamiento de niños y niñas con discapacidad o con necesidades especiales, en la organización de talleres de temáticas diversas, en el servicio de comedor y merienda, en labores de jardinería y horticultura, e incluso en terapias ecuestres y tratamiento logopédico.

Su contribución tiene un impacto muy positivo en los niños, niñas y jóvenes atendidos por Aldeas Infantiles SOS. Para Mohamed, que participa en el Programa de Jóvenes, no hay ninguna duda: “La labor de los voluntarios ha sido esencial para mi aprendizaje en el instituto. Además de apoyarme en todo momento y resolver mis dudas, me han ayudado a tener una mejor organización a la hora de estudiar”. Un beneficio que es bidireccional, tal y como explica Teresa, voluntaria presencial de uno de los Centros de Día de Aldeas: “Lo que resulta al final es que todo ese tiempo que dedicas al voluntariado te es devuelto en forma de amor, cariño y respeto”.

En lo que va de año, 228 voluntarios y voluntarias han colaborado con Aldeas Infantiles SOS, todos ellos comprometidos con la infancia vulnerable y con muchas ganas de sumar para conseguir una sociedad más justa. El perfil mayoritario es femenino, con una edad media comprendida entre los 19 y los 65 años y con estudios superiores o universitarios. La organización continúa recibiendo un número muy elevado de solicitudes de personas que quieren colaborar, lo que demuestra el compromiso y la preocupación social por los más pequeños.

Aldeas Infantiles SOS agradece y aplaude la labor de todos y cada uno de sus voluntarios y voluntarias, cuyo entusiasmo y buen hacer contribuye a mejorar las vidas de la infancia y la juventud más vulnerable. Así lo demuestran las palabras de Jesús, voluntario digital de una Aldea Infantil SOS, donde viven niños y niñas que han sido separados de sus familias: “Como cada año, ha habido por mi parte un sentimiento de gran satisfacción y de agradecimiento por la actitud de colaboración de todos. El reto de mejorar su futuro sigue siendo muy estimulante“.

Sobre Aldeas Infantiles SOS
Aldeas Infantiles SOS está presente en España desde 1967. Forma parte de una Federación Internacional fundada en 1949 en Austria y con presencia en 137 países (SOS Children’s Villages). Las asociaciones miembro tienen carácter autónomo e independiente, funcionan de acuerdo con estatutos y la legislación de su país. En 2016 fue galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia.
Su misión es atender a niños, niñas y jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad, impulsando su desarrollo y autonomía mediante el acogimiento en entornos familiares protectores y el fortalecimiento de sus redes familiares, sociales y comunitarias. Trabaja para fortalecer a las familias vulnerables, de modo que puedan atender adecuadamente a sus hijos; protege a los niños y niñas que se han visto privados del cuidado parental, a los que brinda un entorno familiar protector en el que puedan crecer sintiéndose queridos y respetados, y acompaña a los jóvenes en su proceso de maduración e independencia. Más información en www.aldeasinfantiles.es.