Villanueva de Viver asegura su futuro con un acuerdo con la CHJ para regar los cultivos de encinar trufero

Villanueva de Viver asegura su futuro con un acuerdo con la CHJ para regar los cultivos de encinar trufero

Villanueva de Viver sigue dando pasos hacia adelante en la gestión sostenible de sus recursos con el objetivo de afianzar su futuro sin degradar su patrimonio natural. Tras más de un año de negociaciones con la Confederación Hidrográfica del Júcar la localidad del Alto Mijares ha alcanzado un acuerdo para ampliar los riegos a los nuevos cultivos de encinar trufero y con ello potenciar el primer medio de vida de esta localidad del Alto Mijares.

“Puede parecer un pequeño paso, pero para Villanueva de Viver es un acuerdo histórico”, tal y como explicaba la alcaldes, Amparo Pérez Benajas. “Por un lado conseguimos la gestión sostenible de acuíferos, ya que no van a ser necesarios pozos particulares, que acaban empobreciendo los afluentes principales. Por otro lado, la ampliación da respuesta a las necesidades del principal medio de vida actual de Villanueva de Viver”.

La primera junta de la comunidad de usuarios de riego de Villanueva de Viver, llamada Aguachares-Viñas, celebraba este sábado su primera asamblea con la novedad de actualizar y ampliar los riegos de las huertas tradicionales a todas las plantaciones de carrascas truferas. Una novedad avalada por la CHJ, que “es el fruto del trabajo Reinaldo Pastor, vicrepresidente del Consejo Sectorial de Medios de vida, que durante cerca de un año ha estado en negociaciones con la CHJ”.

Un ejemplo a seguir

Villanueva de Viver tiene un territorio dividido en pequeñas parcelas. Una situación que se repite en el interior donde el minifundismo está extendido. “Es aquí donde la comunidad de usuarios de riego ejerce una función de coordinación y control fundamental, puesto que permite a pequeños propietarios que no tienen recursos ni extensión para solicitar un pozo particular poder empezar a regar sus fincas”, explica Pérez Benajas.

“Todos los martes de julio y agosto ya se han podido efectuar cargas de agua para plantaciones de encinar trufero desde la balsa municipal”. Una acción coordinada que implica a una amplia cadena de agentes “y que creemos que puede servir de ejemplo para otras localidades con el mismo problema”, considera la alcaldesa.

De hecho, Pérez Benajas señala que para poner al día los expedientes de los nuevos riegos se ha diseñado una plataforma digital #masvillanueva, a través de la cual los propietarios hacen las inscripciones de sus parcelas telemáticamente facilitando con ello los datos a la Confederación.

Esta labor no solo ayuda a los pequeños propietarios, sino que evita riegos irregulares, advertencias y sanciones por parte del agente fluvial de la CHJ que ha estado supervisando todo el proceso. Por otro lado, también garantiza la sostenibilidad del agua en el municipio ya que el manantial del pueblo es de uso compartido tanto para riego como para el consumo de la población.