El diputado provincial de Desarrollo Rural, Santi Pérez, se ha recorrido esta mañana las comarcas del Baix Maestrat, el Matarranya, en Aragón, y el Montsià, en Catalunya, junto con representantes de las diputaciones de Teruel y Tarragona dentro de una jornada en la que se ha querido dar visibilidad a la apuesta de las tres instituciones para poner en valor los recursos naturales y patrimoniales de la mancomunidad del Sénia, donde se encuentra la mayor concentración de olivos milenarios del mundo.
En el caso de la Diputación de Castellón, su huella queda reflejada en una aportación económica de 22.500 euros para el mantenimiento de estos árboles milenarios y para la conservación de construcciones de ‘piedra en seco’. La finalidad primera es, según ha explicado Pérez, destacar la importancia que se merece al patrimonio agrícola de la zona y configurar un nuevo escenario turístico que capte visitantes apasionados por el medio ambiente y la arquitectura histórica.
“Para esta diputación es muy importante conservar y dignificar nuestro patrimonio y es un gusto poder compartir esta inquietud con otros organismos y trabajar todos a una con este mismo objetivo”. Al final de todo, ha continuado, “los grandes beneficiados son los ciudadanos y nuestro entorno”.
Así pues, Pérez ha contemplado en Penya-roja de Tastavins y en Traiguera sus olivos gigantes, en la Jana ha conocido el Museo del Pou del Mas y en Canet lo Roig ha visitado una exposición sobre el método constructivo de ‘piedra en seco’. La jornada ha terminado en Ulldecona, donde las tres diputaciones y la mancomunidad del Sénia han mantenido una reunión de trabajo. En ella se han detallado las actuaciones previstas para lo que queda de año y se ha constituido la comisión de seguimiento del SIPAM Olivos Milenarios Territorio Sénia, que tiene como objetivo la preservación de estos monumentos naturales y de todo su entorno.