El Ayuntamiento de Vila-real ha contabilizado un total de 139 solicitudes de comercios, autónomos y empresas de servicio en la tercera convocatoria de ayudas Paréntesis del Plan Resistir, dirigidas a los sectores económicos más castigados por las restricciones de la pandemia. Esta tercera remesa cuenta con una dotación de 233.067 euros, que se suman a los 1.050.000 euros que ya ha pagado el consistorio en los últimos meses con cargo a las dos primeras convocatorias del plan. Así, en total, la inyección de ayudas directas a las pequeñas empresas y autónomos de la ciudad ascenderá a cerca de 1,3 millones de euros, sufragados entre el Ayuntamiento, la Generalitat Valenciana y la Diputación.
Por el momento, los más de un millón de euros pagados ya han sido una inyección económica para 458 establecimientos y negocios de la ciudad, “que han supuesto un alivio después de la situación tan complicada a la que han tenido que hacer frente durante el último año y medio”, destaca el concejal de Comercio, Diego A. Vila. “Nos gustaría haber podido destinar aún más dinero, pero la situación económica del Ayuntamiento es complicada, por el lastre de la deuda y el urbanismo heredados de la etapa del PP”, admite el edil, quien añade que “a pesar de todo, hemos priorizado la lucha contra la pandemia, para evitar que los establecimientos tuvieran que bajar la persiana, con ayudas y acciones de dinamización económica que han alcanzado los 4 millones de euros”.
Las subvenciones Paréntesis del Plan Resistir se destinan a empresas con hasta 10 trabajadores, con una consignación de 2.000 euros por autónomo o microempresa, además de 200 euros por cada trabajador. Esta tercera convocatoria se ha dirigido a comercios al por menor de libros en establecimientos especializados; comercios al por menor de periódicos y artículos de papelería en establecimientos especializados; comercios al por menor de productos cosméticos e higiénicos en establecimientos especializados; peluquería y otros tratamientos de belleza; y otros servicios personales.
La primera convocatoria del Plan Resistir se dirigió especialmente a negocios de hostelería y restauración, además de empresas del ámbito deportivo como gimnasios (313 ayudas por valor de 726.800 euros). La segunda convocatoria amplió las ayudas a más establecimientos de otros sectores, también afectados por la crisis derivada de la pandemia como comercios de textil y complementos, floristerías, academias, escuelas infantiles, joyerías, negocios de fotografía o impresión y artes gráficas, entre otros (145 ayudas por valor de 323.400 euros) .
Los cerca de 1,3 millones de las ayudas Paréntesis se suman a otras iniciativas de carácter exclusivamente municipal que el Ayuntamiento de Vila-real ha adoptado en el último año y medio para paliar los efectos de la crisis en la economía local. La exoneración de la tasa de ocupación de terrazas, por dos años consecutivos, ha supuesto dejar de ingresar en las arcas municipales unos 360.000 euros, a los que se suman los 50.000 euros de las ayudas municipales al sector del ocio nocturno o los 350.000 euros de la bonificación del 95% del IBI a los locales donde se ubica un negocio. Los 500.000 euros consignados en 2020 y 2021 para el Pacto local por el renacimiento o los 620.000 euros destinados a actividades de dinamización económica como la Feria de Navidad o Vila-real Renaix, ambos con compañías y grupos locales, se suman al esfuerzo económico del consistorio en la lucha anti covid hasta alcanzar cerca de 4 millones de euros.