Desaparece el festival «Vila-real en Dansa»

Desaparece el festival «Vila-real en Dansa»

Disfrutar de espectáculos profesionales de danza contemporánea en la provincia de Castellón era imposible hace diez años y por esto, la bailarina y coreógrafa Pepa Cases, decidió que era el momento de crear un festival para dar a conocer esta disciplina, visibilizar la profesión y generar el hábito de que la danza formara parte de las programaciones culturales.

Una década después, las programaciones culturales ya lucen, aunque de una manera muy mínima, con espectáculos de danza en sus propuestas pero se apaga un festival que agoniza, y es que, según su directora artística “puede que fuera un proyecto demasiado ambicioso pero yo aposté por él desde el principio al igual que el concejal de cultura que confió en mí y no como los siguientes en su cargo que más que matar el festival, lo han asesinado. El presupuesto de 21.000€, que llegó en los dos últimos años por fin, sirven para arrancar un proyecto y no para mantener con vida el que celebra diez ediciones, así ni puede crecer ni mejorar ni dignificar el sector que ya está bastante sacudido por las diferentes crisis tanto social como ahora sanitaria. Es una pena que estos proyectos que cuestan tanto de levantar, cuando al fin caminan, no se les apoye”.

Un festival que empezó de una manera humilde pero firme, contagiando su esencia de festival con carácter de encuentro a otros proyectos del que es pionero, todo un referente a nivel estatal,  un evento único para el sector de la danza y para el público dadas las diferentes propuestas artísticas y que, año tras año no se ha visto mejorado en sus condiciones económicas, ni aun teniendo en cuenta el gran apoyo del Institut Valencià de Cultura.

“No entiendo como el Ayuntamiento de Vila-real apoya firmemente la EMD (Escola Municipal de Dansa Contemporània) desde sus inicios, tanto de manera económica como potenciando su crecimiento y confiando en este proyecto educativo, y no lo hacen con el festival, dado que ambos nacieron de la mano y a mi parecer, se nutren y se necesitan. Estoy cansada y decepcionada con la concejalía de cultura y prefiero poner mi energía en otros proyectos donde se valore la calidad por encima de la cantidad» explica Cases.

Un fin de semana repleto de piezas breves de danza de carácter internacional, que se podían disfrutar en el Auditorio Municipal, en la calle e incluso en espacios no convencionales, talleres para todo tipo de públicos, jams de danza, tertulias con el sector profesional, presentaciones de libros, piezas infantiles y sobretodo danza, mucha danza que, desde ahora, deja un vacío para el público amante del movimiento y la vanguardia.