El portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, ha recordado tras la declaración por el Consejo de Ministros de las Sociedades Musicales valencianas como Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial que “a pesar de destacar que son una herramienta fundamental para la convivencia que genera espacios de relación intergeneracional y que cuenta con más de 43.000 músicos, el Gobierno ha optado por seguir gravando sus instrumentos musicales con el tipo máximo de IVA”.
Mulet ha tratado en los últimos meses, a través de una moción que fue aprobada en el Senado, de conseguir una rebaja del actual 21% al 10% en el IVA que las familias pagan por la compra de instrumentos musicales que fue aprobada por 14 votos a favor y 14 en contra. “Una medida que todavía no ha cumplido el Gobierno que reconoce la labor educativa, cultural y social de estas organizaciones pero que, lamentablemente, a la hora de la verdad, sigue sin rebajarles la fiscalidad a un segmento poblacional que se estima en 3,6 millones de personas que practican de forma habitual la música en España”, recuerda.
La coalición insistió en esta medida introduciendo enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado y a la propia Ley de Educación (LOMLOE) con distintas propuestas para mejorar la fiscalidad de las sociedades musicales, sus escuelas y bandas de música, así como de los propios músicos. Tras conversaciones con la Confederación Española de Sociedades Musicales (CESM) la coalición trasladó enmiendas a ambas leyes de forma que fuera más justo su esfuerzo fiscal, atendiendo a la voluntariedad de los músicos y al tipo de sociedades, puesto que las musicales “carecen de finalidad lucrativa y revierten sus beneficios en actividades de idéntica naturaleza”.
Las enmiendas reclaman reducir el tipo de gravamen aplicable en el impuesto de sociedades a los rendimientos de las actividades propias que desarrollen las bandas de música (conciertos y actuaciones de calle), del 25 al 10% y, por otro lado piden que las compensaciones que reciben los músicos voluntarios sigan estando tratadas en el IRPF como rendimientos del trabajo “cuando deberían estarlo como meras dietas y asignaciones para la manutención, ya que se trata de unas cantidades simbólicas por las molestias y costes de sus desplazamientos que llevan música y cultura a numerosas plazas en fiestas y actividades”, señaló Mulet.
La rebaja en el tipo de IVA aplicable en la adquisición de los instrumentos musicales beneficiaría a más de 3,6 millones de personas con un impacto muy pequeño anual, cercano a los 11 millones de euros. “Es importante recordar que la media europea está en el 12,5% de IVA. Cuando pueden demostrar de verdad su voluntad real con los músicos con medidas como podría ser la reducción del IVA aplicable, no lo hacen, prefieren seguir exprimiéndoles”, ha dicho.