Almassora retoma el derribo del Grupo B 22 años después

Almassora retoma el derribo del Grupo B 22 años después

El edificio 167 de la avenida José Ortiz de Almassora ha comenzado hoy su desaparición definitiva 22 años después del derribo de las 56 primeras viviendas. El conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau, ha visitado la zona junto a la alcaldesa, Merche Galí, para presenciar el inicio de unos trabajos que tienen un plazo de ejecución de tres meses y que han arrancado ya en el interior del bloque.

El jefe de obra de la empresa Construcciones y Desmontes Ribera Navarra S.A., el director general de la Entitat Valenciana d’Habitatge i Sòl (EVha) de la Generalitat Valenciana, Alberto Aznar, y representantes del vecindario se han acercado hasta la zona donde los operarios han comenzado a vallar el perímetro del bloque para garantizar la seguridad de los transeúntes durante el derribo.

Tal como ha indicado la empresa adjudicataria de los trabajos, durante estas fiestas está previsto el desmontaje de estructuras internas, la retirada de las canalizaciones y red eléctrica, los sanitarios y el grueso de la demolición queda programado para después de la Navidad con la intención de reducir las molestias a un vecindario que, previsiblemente, pasará más tiempo en casa durante las celebraciones navideñas.

Todos estos trabajos que ya han comenzado permitirán revisar las instalaciones, retirar la basura acumulada durante años y los voluminosos abandonados en el interior del bloque para eliminar finalmente baños y cocinas, todo ello a mano con el objetivo de minimizar los ruidos a los residentes del edificio contiguo.

La empresa ya ha fijado el vallado perimetral y ha instalado la señalización de las obras para evitar el acceso a personal ajeno a los trabajos. Tras estas labores quedará libre el armazón del edificio, que comenzará a derribarse después de Reyes mediante trabajos más pesados con maquinaria específica. Será entonces cuando quede restringido el paso de peatones por la avenida José Ortiz, que se limitará a la acera norte para que no exista riesgo para los transeúntes y los operarios dispongan de más espacio para trabajar con comodidad.

Además, la Conselleria y la empresa encargada de los trabajos han editado unos folletos informativos sobre el plan de obra y se han comprometido a tener reuniones con los vecinos para detallarles las tareas a ejecutar y el calendario que marcará la demolición de las 38 viviendas después de que en 1998 tuviera lugar el primer derribo.

Galí ha agradecido al conseller Martínez Dalmau y a su antecesora, María José Salvador, “todos los trámites realizados para que las promesas anteriores se conviertan hoy en una realidad, dotada de presupuesto y verdadera voluntad política”. No en vano, la empresa ha ganado el concurso de adjudicación con una oferta de 269.047,05 euros.