Almassora reformará la plaza Mayor de la Vila en 2021

Almassora reformará la plaza Mayor de la Vila en 2021

El Ayuntamiento de Almassora ha fijado para 2021 la reforma de la plaza Mayor y las calles adyacentes dentro del Plan Especial de la Vila, que comenzó a ejecutarse este año en la calle San Joaquín y la plaza de la Iglesia. La segunda fase de la intervención contará con un presupuesto de 400.000 euros a cargo del consistorio y los fondos FEDER de la Unión Europea al 50% para garantizar la accesibilidad de este enclave histórico.

Así lo ha anunciado esta mañana la alcaldesa, Merche Galí, tras el acuerdo alcanzado entre el equipo de gobierno y los técnicos municipales de Urbanismo, encargados de la dirección de la obra, para valorar las distintas opciones que permitan regenerar el casco antiguo durante esta legislatura. De esta forma, la fase 2 del proyecto incluirá la plaza Mayor y las calles Virgen de los Dolores, San Cristóbal y San Miguel, además de la travesía de Gimeno.

La intención del consistorio pasa por, al igual que en las obras en curso, renovar instalaciones y mobiliario y eliminar los bordillos que impiden el acceso de personas con discapacidad, carros de bebé y de la compra. Por tanto, al igual que en la reforma que ejecuta Grupo Ravi en la primera fase, la próxima intervención permitirá situar el entramado urbano del eje central de la Vila a una única altura.

La plaza Mayor copará 960 metros cuadrados de actuación. Hacia el este, la calle Virgen de los Dolores incorporará otros 275 metros cuadrados y, en sentido opuesto, las calles San Cristóbal (265 metros cuadrados) y San Miguel (255) sumarán el resto de la intervención, siguiendo las características de la intervención actual a fin de crear una reforma homogénea en un barrio que tiene la denominación de Bien de Interés Cultural (BIC).

“Después de años de olvido, el plan para la peatonalización de la Vila permitirá poner en valor un espacio único y, al mismo tiempo, mejorar las condiciones de vida de las personas que habitan en el casco antiguo y acabar con las barreras arquitectónicas”, según ha indicado la primera edil. Galí ha recordado que la apuesta por la accesibilidad forma parte de los proyectos de regeneración urbana con el objetivo de evitar el abandono de los barrios.

En la actualidad está en ejecución la fase 1, valorada en 441.940,52 euros, que supone la intervención sobre una superficie de 2.289,30 metros cuadrados. Las piedras de Borriol y rodeno, autóctonas de la zona, cuentan con el visto bueno de la Conselleria de Patrimonio para la renovación del pavimento, respetando así la identidad del barrio y con el objetivo de evitar caídas entre los transeúntes.