El Partido Popular de Castellón prepara una iniciativa que elevará a todos los ayuntamientos y a la Diputación con el objetivo de que las instituciones manifiesten su rechazo al impuesto político que Ximo Puig, presidente del Consell, ha lanzado contra los turistas que desean visitar la provincia. “Esta es una provincia que tiene en el turismo un pilar económico que es bienestar para miles de familias. Castigar a quien nos visita con un impuesto que Ximo Puig promueve para no perder la presidencia es indigno. Lo que necesitamos son inversiones, no castigos fiscales”.
Andrés Martínez, coordinador territorial del PPCS, ha reivindicado la voz de una provincia “que el PSOE se ha acostumbrado a silenciar en los últimos años”. La implantación de la tasa turística, que el PSOE y sus socios cargarán a los visitantes, está previsto que se defina en el segundo trimestre para aplicarla en 2023.
“El PSOE ha decidido crear la tasa para contentar a sus socios de Compromís y Podemos. Sin embargo, la decisión final la delega en los ayuntamientos, descargando en ellos toda responsabilidad y obligando a los municipios a decidir sobre un impuesto político tras el que solo hay un deseo de poder: el de Ximo Puig”.
Martínez confía en que la voz de la provincia sea tenida en cuenta “con una iniciativa que pretende alzar el rechazo a este impuesto político que el PSOE se empeña en silenciar”. “Vamos a ejercer de altavoz del territorio, a hacernos eco del rechazo de la provincia a esta tasa turística y a reivindicar alto y claro la inversión que sí merece Castellón y que sin embargo el PSOE le niega”.
Para el coordinador territorial del PPCS, “tanto ayuntamientos como Diputación tendrán la oportunidad de pronunciarse sobre una tasa que en 2021 el PSOE negaba y hoy ya es un hecho. Ya no nos pueden engañar, su objetivo es que en 2023 cualquier turista que desee visitarnos tenga que pagar por hacerlo. Y ese es el mejor repelente para provocar la fuga de turistas cuando lo que necesitamos son imanes que los atraigan”.