El vecindario del barrio Pío XII de Almassora ha participado en el diseño de la renovación que aglutinará cerca de 300.000 euros este año. La alcaldesa, Merche Galí, acompañada de parte del ejecutivo local, se ha desplazado hasta la plaza de Carmelina Sánchez-Cutillas para la presentación del proyecto cofinanciado por fondos FEDER y el Ayuntamiento al 50%.
Galí ha celebrado el Dia del Veí al Barri en el entorno de este distrito que renovará aceras para garantizar la accesibilidad y aprovechará la intervención para mejorar la red de abastecimiento de agua potable. Así lo traslado la primera edil junto a la concejala de Territorio, Carmina Martinavarro, que detalló también el cambio de la nomenclatura de las calles para atender la problemática de envíos de mensajería privada.
Al tiempo, los representantes municipales trasladaron las mejoras que supondrán unas obras que tienen un plazo de ejecución de cuatro meses y que ampliarán las aceras, situarán rebajes de accesibilidad y configurarán el aparcamiento en cordón en el entramado urbano. Tal como indicaron, la empresa adjudicataria de las obras renovará el pavimento tras adecuar las canalizaciones de agua a las necesidades actuales para evitar los problemas de insuficiencia hidríca registrados frecuentemente. Además, el colector de saneamiento de 200 mm de diámetro, indican los técnicos, está “muy por debajo de los recomendados”.
Sobre plano, los residentes comprobaron la afección de unas obras que afectarán a 25.000 metros cuadrados y que solventarán los problemas derivados de la antigüedad de las instalaciones. Aceras estrechas, pavimento deteriorado, bordillos de altura irregular y falta de pasos de peatones para garantizar la seguridad son algunas de las deficiencias que corregirá el proyecto cofinanciado por la Unión Europea y el Ayuntamiento.
La actuación forma parte de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (EDUSI) a través del objetivo temático ‘Regeneración física, económica y social en áreas desfavorecidas’, que también incluye en 2022 la remodelación de los barrios de Corell y Fátima, tal como figura en el presupuesto municipal del ejercicio en curso, para adecuarlos a las prestaciones e infraestructuras del resto.
Al tiempo, el equipo de gobierno emplazó a las personas asistentes a un futuro encuentro para aportar sugerencias de uso del suelo que dejen los barracones del colegio Santa Quitèria una vez que el centro se traslade al nuevo edificio. Además, el vecindario propuso instalar más bancos en las inmediaciones de este centro, que el Servicio Municipal de Mantenimiento y Logística instalarán entre esta semana y la próxima.