El Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Millars formado por los ayuntamientos de Burriana, Almassora, Vila-real, la Diputación de Castellón y la Generalitat Valenciana reparará en breve un tramo formado por ocho balizas de madera de unos 15 metros y destrozadas en actos vandálicos. La valla arrancada estaba formada por palos de madera anclados en el suelo con una base de cemento y unidos con cuerdas gruesas o traviesas de madera y algunos elementos fueron lanzados al río. Esta zona alta de la ruta botánica ubicada en el margen derecho del río en el término de Vila-real, recuerdan desde el Consorcio, la transitan a diario por decenas de caminantes, deportistas y ciclistas. Precisamente la zona destrozada es una de las más estrechas y peligrosas de la senda. Los responsables de este paraje piden precaución a los usuarios hasta que se acometen los trabajos de reparación por parte de la brigada de mantenimiento lo antes posible.
Los vándalos destrozan parte de la valla de madera de la ruta botánica en Vila-real