La feria de Santa Catalina de Vila-real resiste a la COVID-19 con un formato seguro en recintos acotados y con control de aforo

La feria de Santa Catalina de Vila-real resiste a la COVID-19 con un formato seguro en recintos acotados y con control de aforo

La Concejalía de Economía trabaja ya en la organización de la feria de Santa Catalina de 2020 que, si la evolución de la pandemia lo permite, se celebrará el 29 de noviembre, adaptada a la situación actual, con menos paradas, distribuidas en sentido único, en recintos acotados para poder controlar el aforo y garantizar las medidas de prevención como el uso obligatorio de mascarilla y gel hidroalcohólico. El concejal de Economía, Xus Madrigal, ha presentado hoy la edición de este año de la feria “un símbolo para la ciudad» y «una cita comercial muy esperada tanto por los vecinos y vecinas como por los comerciantes, puesto que es un motor económico muy importante». En este sentido, el edil ha defendido la necesidad de «no renunciar a ella, siempre con prudencia y cordura y trabajando desde la planificación».

Para poder desarrollar esta feria tradicional, declarada Fiesta de Interés Turístico Provincial desde 2011, la Concejalía de Economía ha seguido el modelo de los mercados ambulantes de la ciudad, que se han reactivado en los últimos meses con todas las medidas de prevención ante la COVID-19. De este modo, según ha explicado, la feria se estructurará en diferentes ‘micro mercados’ que se instalarán por la avenida de la Murá y avenida Pío XII, calle José Ramón Batalla, calle Hospital, Arrabal de Carmen, calle Mayor Santo Domingo y plaza Mayor. «Serán recintos acotados de forma que se podrán controlar las medidas de seguridad como aforo, uso de máscara, desinfección de manos con gel hidroalcohólico,…», ha apuntado Madrigal.

Además, otra de las novedades es la disposición de las paradas en cada uno de los ‘micro mercados’ en un único lado de la calle, de forma que el sentido de circulación será unidireccional y los asistentes irán accediendo a cada recinto después de pasar el correspondiente control de entrada. Habrá un máximo de 200 puestos de venta en la suma de todos los recintos y se priorizará las paradas de productos tradicionales navideños y artesanales, además de juguetes, productos de alimentación, así como estands de las ONG, que se ubicarán en la plaza Mayor.

Finalmente, el concejal ha pedido a la ciudadanía prudencia y comprensión a la hora de participar en esta feria puesto que «si entre todos respetamos las normas y colaboramos podemos mantener una tradición tan nuestra que se remonta a la fundación de la ciudad».

En este sentido, Madrigal ha recordado que “Vila-real ha sido pionera en retomar actividades durante la desescalada y hemos demostrado que si se trabaja con planificación, sentido común y respetando las normas, se puede conseguir que la ciudad siga viva y no se paralice por la pandemia”. El edil de Economía ha tomado como ejemplo la reactivación de los mercados ambulantes. “Vila-real fue la primera ciudad de la Comunitat Valenciana en reactivarlos después del estado de alarma y, gracias al trabajo de los técnicos de la Concejalía de Economía y la colaboración de los vendedores y usuarios, en estos momentos tenemos los cinco mercados ambulantes en marcha”, recalca, y añade que “lo hemos hecho manteniendo el 100% de los puestos de trabajo de los vendedores y garantizando la seguridad de los usuarios”.